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La participación también se repartirá en los quioscos de Valladolid

  • Este martes se ha aprobado en el Pleno Municipal nuestra moción para la reutilización de estos espacios vacíos esparcidos por toda la ciudad por medio de un concurso de ideas

La apuesta es clara: la participación política no consiste en votar una vez cada cuatro años y olvidarse hasta la próxima ocasión en la que toque echar la papeleta en la urna. El concepto de participación consiste en implicarse día a día, en formar parte real de las actividades municipales, y por ello es una responsabilidad de las instituciones dar oportunidades para que la ciudadanía pueda hacerlo.

Por ello, sentimos especial orgullo por la moción que hemos conseguido sacar adelante en el Pleno Municipal de este martes para que los quioscos vacíos de Valladolid puedan volver a llenarse de actividad y vida a través de las ideas de vecinos y vecinas. Son muchos municipios del país los que, ante el acusado descenso de ventas de la prensa escrita, han decidido dar un nuevo uso a estos quioscos. ¿Por qué no hacer lo propio dándole una nueva oportunidad a la participación?

En nuestra ciudad se cuentan cerca de 250 puntos de venta de prensa y golosinas que cuentan también con otras funciones, como la recarga del bonobús o de móvil. Muchos de ellos funcionan con una concesión que supone el pago de un canon por ese uso privativo. Cuando esta concluye, el titular debe levantar la instalación y reponer el pavimento en buenas condiciones.

Aquí entra un factor importante para la ciudad amable que buscamos, como es el respeto a lo histórico y a lo nostálgico. En Valladolid tenemos algunos quioscos históricos como el de la Plaza del Caño Argales, otros denominados “modelo antiguo”, otros “modelo Paseo de Zorrilla”, además de otros llamados “modelo de diseño”, como el de Teresa Gil, el de la calle de Santiago o el acristalado de Recoletos. Una bonita variedad de locales para los que la ciudadanía decidirá su uso.

En otras ciudades se ha empezado a plantear la posibilidad de dotar de nuevos usos a estos elementos urbanos. Por ejemplo, el Ayuntamiento de Valencia dio inicio en 2016 a un proceso que contemplaba la elaboración de un censo de quioscos vacíos, un estudio sobre posibles cambio de ubicación que pudieran favorecer su actividad y una reconversión en puntos de venta de entradas para espectáculos municipales en algunos de los que permanecieran cerrados, así como un replanteamiento de la ordenanza de espacio público.

Y si el resto de grupos municipales hacen propuestas lógicas y razonadas para mejorar nuestras mociones, estas se estudian como merecen. Y si son válidas y aportan, se aceptan. A fin de cuentas, por este motivo se trasladan las ideas al Pleno. El Partido Popular sostuvo la posibilidad de realizar un mapa de estos quioscos para tenerlos bien localizados y así lo hemos añadido a nuestra moción. Porque hacer política significa escuchar a todo el mundo.

*Consulta la moción completa en el siguiente enlace.